Durante el año 2014 la AECOSAN (Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición) ha publicado 36 casos de alertas por alérgenos en productos alimentarios.
La causa de la mayoría de las alertas ha sido por un mal etiquetado de los productos, que contenían ingredientes alergénicos no declarados en las etiquetas. En 10 de los casos, los productos eran de procedencia española.
Entre los alérgenos detectados encontramos: gluten, leche/proteínas lácteas, huevo, cacahuete, frutos secos, sulfitos, pescado y soja.
Cuando se da una alerta de este tipo, a nivel español se procede a informar de los hechos a las autoridades competentes de las Comunidades Autónomas a través de la Red de Alerta Alimentaria nacional (SCIRI) con el fin de que realicen las actuaciones oportunas. Además, se traslada la información a través del Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (RASFF) para informar a los países donde se haya distribuido el producto.
El consumo de estos productos no comporta ningún riesgo para los consumidores no alérgicos.
Fuente: AECOSAN.