Un brote de legionelosis en Blanes (Gerona) afecta a ocho personas de entre 52 y 92 años. Todas ellas han necesitado ingreso hospitalario: dos de ellas ya han recibido el alta, cinco siguen en observación médica en el hospital Comarcal y la Agencia de Salud Pública de Cataluña ha comunicado recientemente que una de las personas afectadas falleció el pasado viernes. Todavía es pronto para establecer las causas, que están siendo investigadas. Una de las hipótesis apunta a que el origen de este brote puede estar en unas torres frigoríficas ubicadas cerca de este territorio.
La legionelosis es una patología causada por una bacteria que suele encontrarse en lugares donde existe mucha humedad, sobre todo si hay agua estancada y puede localizarse, también, en la tierra.
Todos los afectados tenían edad avanzada o alguna patología de base. Los síntomas de todos los afectados se iniciaron entre el 22 de septiembre y el 8 de octubre y se conoce que todas las víctimas tienen residencia o se habían alojado en ese municipio durante el periodo de incubación, anterior a la aparición de los síntomas.
No es la primera vez que aparece un brote de legionelosis en Cataluña. Sin ir más lejos en el año pasado se detectaron tres brotes similares. Uno de ellos en la localidad de Salou (Tarragona) que afectó a siete personas, entre las cuales un hombre de 50 años, que falleció después de contraer esta afección en el lugar donde veraneaba. En Mollet del Vallès (Barcelona) también hubo una manifestación de esta enfermedad, con tres personas afectadas, dos de ellas sin gravedad, pero una de ellas también perdió la vida. Y un tercer brote fue localizado en Vilafranca del Penedés (Barcelona), donde no hubo víctimas mortales, pero cuatro mujeres de entre 52 y 81 años tuvieron que ser hospitalizadas.
Legionella Pneumophila es la bacteria responsable de esta patología asociada a la inhalación y/o aspiración de vapores, aerosoles, pulverizaciones o a través de la inspiración de agua o hielo contaminados.
Actualmente, a pesar de no conocerse la dosis infectante, se conoce que en sujetos vulnerables no es elevada, pero esto se verá condicionado por la concentración de Legionella en la fuente de la infección, la virulencia de cada cepa concreta, el tiempo de exposición, el estado del sistema inmunitario y/o alguna enfermedad preexistente en el sujeto.
Existen dos cuadros clínicos posibles tras inhalar esta bacteria; el primero, y menos grave, es la fiebre Pontiac, con síntomas parecidos a los de una gripe. El segundo cuadro clínico es conocido como la enfermedad del legionario, que se manifiesta en forma de una fuerte neumonía con fiebres muy altas pudiendo, incluso, provocar la muerte.
Salud Pública sigue con la búsqueda epidemiológica para conocer el inicio de este último brote, a partir de las muestras recogidas en los afectados. A la misma vez, se ha abierto un estudio medioambiental y se están realizando encuestas epidemiológicas para delimitar el foco del contagio y poder, así, localizar las instalaciones de alto riesgo.
La normativa existente va destinada a incrementar la prevención y el control en aquellas instalaciones que pueden ser un foco de legionelosis. Hay establecidas varias medidas para asegurar que estos equipamientos no sean una fuente de peligro: muestreo para torres de refrigeración y condensadores, revisiones anuales obligatorias de estos equipos, permisos especiales para aquellas empresas instaladoras de este tipo de indumentaria, etc. También se establecen las decisiones a tomar en caso de que los resultados de estos muestreos no sean los deseables.
El Decreto 352/2004, de 27 de Julio, por el cual se establecen las condiciones higienicosanitarias para la prevención y el control de la legionelosis, hace responsable al titular de las instalaciones de que se lleven a cabo los programas de mantenimiento, limpieza, desinfección adecuados y verifique la efectividad mediante controles analíticos. Además obliga a informar al ayuntamiento del municipio dónde se va a proceder a la instalación de equipos o instalaciones que se consideran de alto riesgo, como son las torres de refrigeración o los condensadores evaporativos. Asimismo, se proponen medidas para el sistema de entrada/salida de agua y para evitar la estanqueidad de la misma y así evitar los lugares donde pueden proliferar las colonias.
Fuentes: CCMA, Gencat, OMS, CuidatePlus, SalutPública.