Un pequeño fallo puede causar daños graves y hasta consecuencias mortales, de acuerdo con el Departamento Oficial de Justicia de Estados Unidos (DOJ).
Es fácil pensar que “esto nunca podría suceder en mi empresa» y que “nunca podría pasarme a mí». Los trabajadores implicados en el sector alimentario realizan su trabajo con la mayor seguridad posible asegurando que los procesos que utilizan son adecuados y los productos que venden son seguros. Pero en ocasiones se observan casos de alertas alimentarias que pueden dar lugar a graves consecuencias sanitarias.
Es por ello de suma importancia que todos los actores de la cadena alimentaria tengan como objetivo no solo la producción o comercialización de los alimentos sino que, además, estos sean seguros.
Fuente: Food Quality