Dos mujeres de 75 y 85 años fallecieron en la noche del viernes a causa de un brote de gastroenteritis que afectó a otros 18 usuarios del centro de Mayores en Guardamar.
Los hechos se produjeron durante la noche del viernes, cuando sobre las 21.10 horas el servicio médico de este centro privado con plazas concertadas alertó al Centro de Información y Cooordinación de Urgencias (CICU).
Cinco de estos 18 afectados fueron trasladados al Hospital de Torrevieja, mientras que el resto fueron aislados en el propio centro, donde evolucionan favorablemente, según dieron a conocer ayer fuentes de la Conselleria de Sanidad.
Técnicos de Salud Pública se desplazaron el sábado al geriátrico para realizar un estudio epidemiológico para determinar el origen del brote, aunque según indicaron ayer las mismas fuentes, aún se tardará en conocer el origen exacto de la enfermedad que ha cogido por sorpresa a una veintena de usuarios. La inspección trabajó ayer bajo dos hipótesis principales: la intoxicación alimentaria o un brote de origen vírico, si bien apuntaron a que puede haber otras causas, que también se están investigando.
Las cinco personas que fueron trasladadas al Hospital de Torrevieja, y que fueron ingresadas en la unidad de Observación, permanecían en planta ayer por la tarde, por lo que, en principio, también evolucionan favorablemente. Se trata de tres mujeres, de 93 y otras dos de 82 años, y dos varones de 72 y 88 años, según fuentes sanitarias. Del resto de pacientes se encarga el médico de la propia residencia, que fue quien dio el aviso el viernes por la noche, alrededor de las 22 horas, al Centro de Información y Coordinación de Urgencias, que trasladó a los enfermos en peor estado hasta el Hospital de Torrevieja.
En la noche del viernes, y como precaución, el personal de la residencia se cubrió el rostro con mascarillas ante el temor de que la infección fuese de origen vírica y pudiera contagiarse, si bien ayer el ambiente era de normalidad en el centro.